Unas 300 personas acudieron ayer a ‘Las cañas del cortometraje’, elencuentro informal organizado por CortoEspaña, que se convirtió en un punto de reunión para profesionales e interesados en el cine corto. Un formato, el cortometraje, que tradicionalmente ha sido la puerta de entrada a la industria audiovisual.
Durante la velada, los asistentes han podido intercambiar experiencias y encontrar respuestas. Por ejemplo: cómo conseguir un representante o cómo distribuir un cortometraje. También se han escuchado reivindicaciones habituales, como la de «no trabajar gratis», en un sector que demandaba más encuentros de este tipo, alejados del glamour y con una visión más realista a la par que entusiasta.
Una cita en la que no ha faltado el intercambio de tarjetas pero que, sobre todo, ha forjado muchos nuevos lazos y sinergias. Un encuentro en el que, seguramente, se habrán sentado las bases de proyectos que, a día de hoy, son todavía una hoja en blanco.
Sobre los Premios Fugaz
Los Premios Fugaz son los principales galardones del cortometraje español y los únicos decididos por una gran comisión de profesionales compuesta por más de 500 personas vinculadas al sector del cortometraje. En su tercera edición, celebrada en mayo de 2019 en la Sala 25 de Kinépolis Madrid conmás de 1.000 butacas, se otorgaron 18 estatuillas que premiaron todos los aspectos que intervienen en la creación de un cortometraje, además de dos premios homenaje que recayeron en las figuras de Daniel Sánchez Arévalo y Asunción Balaguer, por sus carreras profesionales íntimamente ligadas al formato corto.CortoEspaña es la plataforma de promoción y exhibición del cortometraje que organiza unas 150 proyecciones anuales en municipios de todo el país. De todas ellas, unas 50 pertenecen al Festival Itinerante CortoEspaña. Durante sus 10 años de vida, ha organizado más de 1.000 proyecciones y ha llegado a más de 150.000 espectadores. El circuito proyecta los trabajos más destacados de los Premios Fugaz.