El propio Mariné inaugura el ciclo el próximo 29 de diciembre con la proyección en el Cine Doré de El gran Ziegfeld.
Con motivo del 100 cumpleaños de Juan Mariné, Filmoteca Española rinde homenaje a esta importante figura de nuestro cine con la puesta en marcha del ciclo El siglo Mariné, que incluye una sesión mensual en el Cine Doré, a partir de las películas que forjaron su vida, escogidas por él mismo, entre este mes de diciembre de 2019 y el de 2020.
Su primera elección, que se proyecta el próximo 29 de diciembre a las 17:30hrs. y que será presentada por el propio Mariné en compañía de Josetxo Cerdán, director de Filmoteca Española, ha sido El gran Ziegfield (Robert. Z. Leonard, 1936). Un musical escogido para mostrar la férrea voluntad de quien siente el pálpito de volver a hacer cine, actividad que había quedado interrumpida después de la Guerra Civil, cuando fue cámara para las autoridades republicanas. Después de un breve paso por el exilio, donde fue posiblemente el único español que escapó con vida del campo de concentración de Argelès-sur-Mer, y el prolongado internamiento en los campos de prisioneros a su regreso a la España de Franco, asistió a una proyección del musical de Leonard que le hizo recuperar la ilusión y el interés por trabajar en el mundo del cine y, más concretamente, la fotografía.
Más tarde, Juan Mariné lideraría durante varios años el trabajo de restauración fílmica de Filmoteca Española. Durante todo este tiempo y hasta nuestros días, cuando sigue teniendo un pequeño laboratorio de investigación en la ECAM, Mariné ha continuado investigando, trabajando y aportando nuevos conocimientos a la fotografía y la restauración fílmicas.
Una vida dedicada al cine
Juan Mariné Bruguera nació en Barcelona el 31 de diciembre de 1920. Su trabajo de fotografía y restauración recorre todo el cine español del siglo XX. Llegó al mundo del cine por casualidad, donde ha trabajado desde los 14 años. Empezó como ayudante en los estudios cinematográficos, pero el estallido de la Guerra Civil lo obligó a empuñar una cámara y trabajar en el frente recogiendo imágenes para noticiarios de Laya Films, la productora oficial de la Generalitat de Catalunya durante el conflicto.
A lo largo de su prolongada carrera ha trabajado en la fotografía de más de 130 películas y, lejos de jubilarse, sigue aportando su conocimiento para la restauración de películas de los orígenes en su laboratorio de la ECAM.
El historial de premios y reconocimientos de quien fuese también restaurador de Filmoteca Española se extiende a lo largo de los años: entre otros muchos, ha recibido el Premio Nacional de Fotografía (1966) y el Premio Nacional de Cinematografía (1994), además de haber sido objeto de diversos documentales con él como protagonista.
El ciclo que este mes inicia Filmoteca Española recogerá títulos tanto fotografiados como restaurados por él. Entre estos podemos desatacar: Orgullo (Manuel Mur Oti, 1955), La gata (Margarita Alexandre y Rafael Torrecilla, 1956), La gran familia (Fernando Palacios, 1962), Supersonic Man (Juan Piquer Simón, 1982), Currito de la cruz (Alejandro Pérez Lugín y Fernando Delgado, 1925), o La aldea maldita (Florián Rey, 1930).