Hablamos con Adrià Guxens director de ‘Kokuhaku’ cortometraje que tendrá su estreno en el Festival de Sitges
El año pasado fue ‘Un soroll llunyà’. Esta primavera, ‘A Hakka Song’. Y ahora, ‘Kokuhaku’. El director tarraconense Adrià Guxens no para, y sigue tendiendo puentes entre Oriente y Occidente, aunque esta vez lo hace con una nueva pieza que asegura que rompe con el camino labrado con su trilogía intergeneracional chino-española “tanto temáticamente como estéticamente”.
El resultado se llama ‘Kokuhaku’, que significa ‘confesión’ en japonés. Se trata de una pieza que está producida por Limmat Films, Batiak Films, Almar Producciones y Forest Film & Media, además de por él mismo y el actor protagonista, Kuni Tomita, quien se abre en canal para contar esta historia semiautobiográfica: “Es un proyecto muy personal, pues través del personaje de Tadashi he podido canalizar experiencias que antes no me había atrevido a confrontar o asimilar, especialmente el dolor de ciertas vivencias del pasado”, cuenta el actor. A lo que Guxens añade: “La verdad, es un corto muy particular, pues mezclamos la temática ‘queer’ con el mundo del ‘kabuki’, los fantasmas japoneses y Sailor Moon”.
Y parece que el Festival de Sitges ha comprado su riesgo, pues ha decidido programarlo en una Sesión Especial que tendrá lugar el martes 8 a las 20:15. Serán los teloneros de una de las grandes películas del festival, Sanatorium Under de Sign of the Hourglass, de los Quay Brothers, y Guxens no puede estar más contento: “Llevaba tiempo queriendo abordar el concepto de las masculinidades en uno de mis proyectos; explorar lo frágil que puede llegar a ser eso que algunos llaman ‘ser un hombre’ y, particularmente, en el seno de la cultura asiática, donde el predominio de la estructura patriarcal es especialmente fuerte debido a la tradición confuciana”, explica.
Y es que ‘Kokuhaku’ también aborda el diálogo intercultural, pues un actor japonés-español y una periodista china intercambian reflexiones en un país que les ha servido de vía de escape, pero sin haber renunciado a sus identidades. “Con esto quiero decir que es muy necesario mostrar la convivencia y mezcla de culturas e idiomas en nuestra sociedad, algo que ocurre con total naturalidad en España y para lo que apenas hay referentes, pues los personajes asiáticos siguen estando aún muy estigmatizados”, apunta el director.
La première en el certamen catalán es solo la primera piedra del que se espera que sea un camino de éxito, pues la película ya tiene asegurado su paso por otro evento de renombre: el Imagine Fantastic Film Festival de Amsterdam, en el que competirá por el prestigioso Méliès d’Argent al Mejor Cortometraje Europeo.
Mientras tanto, Guxens sigue trabajando en la que será su ópera prima, ‘Lóngquán’, una película producida por Pausa Dramàtica Films y La Charito Films que cabalga entre la ficción y el documental y que explora la identidad y las raíces de un joven catalán de origen chino, Junyi Sun. El film se rodará entre Barcelona y la provincia china de Zhejiang próximamente.