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El director Pau Teixidor dirige su segunda película y escrita junto a Lorena Iglesias. ‘Alumbramiento’ ha llegado llega al BCN Film Festival 2024, un drama sobre el internamiento forzoso de adolescentes embarazadas en los llamados reformatorios franquistas que estuvieron abiertos hasta mediados de los años ochenta.
En 1982, mientras la gente festeja la llegada de Felipe González a la presidencia del gobierno como primer presidente de la democracia a Lucía una adolescente de unos dieciséis años (Sofía Milán), su madre, Marisa (María Vázquez), la lleva a un lugar en el que es examinada por un médico y la monja Sor María (Malena Gutiérrez) tras hacerle unas preguntas le dice que se va a quedar allí con ellas.
Posteriormente, es trasladada esposada por dos policías a Peñagrande una especie de internado dirigido por monjas para adolescentes embarazadas. Al llegar a este lugar se encuentra con el implacable recibimiento de la señorita Pura (Laura Gómez Lacueva) una mujer seca y sin el más mínimo sentido de la empatía hacia Lucía.
En este lugar Lucía conoce a otras adolescentes en su misma situación y poco a poco va descubriendo qué es ese sitio y qué ocurre ahí dentro. Las chicas se dedican a limpiar, a cocinar y a rezar porque son pobres las chicas de familias bien solo rezan.
Lucía es una chica introvertida que todo lo que le ocurre lo vive desde la inocencia y desde la incertidumbre pero poco a poco va madurando porque es inteligente y muy observadora. Se da cuenta de que hay hombres que la miran, hombres que van a misa con la excusa de buscar chicas jóvenes para casarse, chicas que se escapan porque quieren abortar o chicas que dan en adopción a sus hijos después de que las monjas las convenzan de que es lo mejor. La absoluta falta de información y formación académica que tenían estas chicas les supone un lastre ya que era algo de lo que se valían las monjas para convencerlas de que no serían capaces de cuidar de sus hijos.
Lucía no está sola y encuentra en Inma (Celia Lopera), Candela (Paula Agulló), Lola (Carmen Escudero) o Rosa (Victoria Oliver), un grupo de amigas cómplices con las soportar el encierro, tener momentos de risas y pasar los malos momentos. La película refleja la dureza, la frialdad y la normalidad con la que estas chicas eran encerradas en estos lugares por sus familias bien porque se quedaban embarazadas de adolescentes y era una vergüenza para las familias o bien porque tenían alguna discapacidad como también vemos en la película. La decisión de Lucía sobre su bebé hacia el final de la película precipita un final tan cruel como desgarrador que hemos escuchado muchas veces en testimonios de mujeres que tuvieron la desgracia de caer en este lugar o en alguno parecido.
La película trata de poner luz en lo que fueron los reformatorios franquistas del Patronato de protección a la mujer que estuvieron abiertos hasta mediados de los años ochenta y sobre los que la transición miró hacia otro lado en los que se sospecha que hubo una trama de bebés robados cuyo centro neurálgico era el reformatorio de Peñagrande.
Pau Teixidor dirige un drama con pulso en el que todo el reparto mayoritariamente femenino está espectacular con especial atención al grupo de adolescentes que están fantásticas. Sin duda podemos estar ante una de las películas españolas de la temporada a tener en cuenta en la próxima temporada de premios y que ojalá la fecha de su estreno acierte a la hora de llamar la atención del público.