3 Butacas de 5
Rally Road Racers es una película de animación, producida por John H. Williams (productor de Shrek) que nos muestra una carrera de alto riesgo a lo largo de una ruta llamada “Silk Road” a través de China.
En dicha película se nos presenta al protagonista, un oso perezoso cuyo sueño es triunfar como piloto de carreras (en contra de lo que la lógica podría decirnos), para seguir los pasos de su ídolo, un sapo (cuya voz de doblaje la aporta el enorme John Cleese, de los Monty Python), que resulta ser el campeón de todos los grandes premios habidos y por haber, al cual se tendrá que enfrentar finalmente Zhi, nuestro perezoso protagonista, en la aclamada carrera.
Otra de las voces más reconocidas es la de J.K. Simmons, quien aporta voz a Gnash, una especie de cabra asiática que tratará de guiar a nuestro protagonista hacia la victoria, acompañándonos con sus eslóganes elocuentes que me hizo recordar al Señor Miyagi en esta especie de “Karate Kid” automovilístico.
La película tiene un ritmo rápido y adecuado para crear y mantener el entretenimiento desde el principio. La animación está repleta de personajes animales amenos (los osos perezosos, un italiano caballito de mar, unos leones africanos), y cada uno de ellos aporta lo suficiente para ir trazando mensajes muy instructivos de valores muy positivos para el público más juvenil como el compañerismo, la solidaridad, la empatía y, finalmente, la búsqueda de nuestro propio camino.
Por otro lado, me apetece atreverme a realizar una mención especial a una fantástica banda sonora, con una selección de temas musicales actuales y no tan actuales como el utilizado “Take on Me” en una escena más propia de su videoclip que de la propia película, aportando así más variedad de matices a una animación eléctrica.
En definitiva, resulta ser una película divertida, graciosa y entretenida, dirigida claramente a un público más infantil y juvenil, pero que recoge elementos de obras más antiguas como “Los Autos Locos” para conseguir un reencuentro entre generaciones en las salas de cine, por lo que resulta fantástico para ver en familia. Y es que poco más se desea para un caluroso verano que disfrutar en el recogido y fresco clima de las salas de cine.