'La Vida Padre': una comedia de recuerdos y fogones

'La Vida Padre': una comedia de recuerdos y fogones

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¿Qué sucede cuando parece que lo hemos visto todo en comedia? Esa es la pregunta que te asalta al comenzar el visionado de La Vida Padre, una comedia española que aspira a ser un éxito de esta ‘nueva temporada, esa que de forma extraoficial comienza a la vuelta del verano, paradójicamente estrenada antes de la temporada de festivales.

Casualmente la cinta está ambientada en el entorno del País Vasco, como todos sabemos enclave tan proclive a la cultura audiovisual como gastronómica. Un círculo casual que ha encajado por fechas. Dirigida por Joaquín Mazón y escrita por Joaquín Oristrell, la cinta de 92 minutos se presenta como una opción muy disfrutable para los amantes; no exclusivamente para ellos; también para el público más afín a la comedia. Una opción para aquel espectador que desee pasar un rato divertido mientras sonríe latente en su butaca ante algunos momentos de la cinta. 

En el apartado del reparto destacan como protagonistas, Enric Auquer y Karra Elejalde, perfilándose en todo momento como un dúo cómico con una química más que elogiable, ofreciendo excelentes interpretaciones. El resto del reparto está compuesto por actores y actrices de reconocida solvencia: Megan Montaner, Gorka Aguinagalde, Lander Otaola o Maribel Salas, especialmente estos últimos destacan.  Además, el chef de origen vasco Diego Guerrero ha actuado como asesor a lo largo de todo el proceso creativo para que la obra resultase verosímil, notándose su contribución a la misma. La comedia mucho menos matemática o analítica que otros géneros y ensamblando tan bien los puntos previamente mencionados producen que las carcajadas del público en sala sean inevitables en varios momentos del metraje o como mínimo se dibuje en el mismo una gran (y grata) sonrisa. 

Asistimos a una historia en la que Mikel (Enric Auquer), ambicioso chef de un conocido restaurante de Bilbao avalado con dos Estrellas Michelin, Restaurante Altaria, encuentra a su padre que desapareció hace 30 años de forma sorpresiva. Este último (Karra Elejalde) alberga grandes lagunas mentales de lo acontecido durante esos años. Mikel se hace cargo de su disparatado e imprevisible padre, tan vitalista y divertido como el propósito de la película (contenido con firmeza por el guion) que busca contraponer todas sus ideas sobre la cocina y la vida, creándose al mismo tiempo una conexión y unión entre padre e hijo emotiva, cómica con verdadero enganche entre ambos y hacia el espectador sobre una relación familiar en la que parece que ya se ha visto o escrito (casi todo) se pueden dar otras vueltas de tuerca en entornos diversos de nuestra geografía subyaciendo una simpatiquísima comedia (después de una etapa en la que la comedia pura solo se asemeja a un compendio de risas) que toca temas cotidianos de la vida. 

La Vida Padre se estrena en cines este viernes 16 de septiembre

SINOPSIS, LA VIDA PADRE (2022)

Mikel, un joven y ambicioso chef, recibe la visita inesperada de su padre, desaparecido hace treinta años. En un momento crítico para el futuro de su restaurante, Mikel deberá hacerse cargo del alocado e imprevisible Juan, un verdadero huracán de vitalidad que pondrá a prueba todas sus ideas sobre la cocina y la vida.