'Una historia de amor italiana': Supereroi

'Una historia de amor italiana': Supereroi

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Tal y como dice el título del filme en español, llega una trama romántica juntando los elementos favoritos de este género, comedia y sobre todo drama, mucho drama.

Paolo Genovese director italiano de Perfectos desconocidos, dirige y coescribe esta trama que nos presenta a dos superhéroes con el poder de sostener una relación estable y que perdure en el tiempo.

Alessandro Borghi y Jasmine Trinca protagonizan este romance tan idílico a la vez que dramático.

Marco, un profesor de física que representa lo racional y estable conoce a Anna una artista emocional e impulsiva bajo la lluvia. La simple decisión de esperar en un portal para no mojarse, genera ese encuentro al que Marco llama destino.

¿Cuantas posibilidades hay de conocer a un extraño en un portal y que se convierta en el amor de tu vida?

A pesar de ser un largometraje bastante predecible en todo lo que sucede ya que cumple con todos los estándares de las películas románticas a las que estamos acostumbrados, hay ciertas ideas y conceptos sobre el amor que me han resultado bastante interesantes audiovisualmente.

El mensaje principal de esta trama gira alrededor del tiempo. Cómo una relación se puede ver alterada por el tiempo, cambiando a las personas hasta el punto de entrar en conflicto con sus propios intereses y su vida. Estamos frente a un montaje de flashbacks constantes en el que viajamos a través del tiempo para ver una pareja joven, ilusionada y que encuentra amor y diversión en todo momento para luego, devolvernos al presente con esa misma pareja que resulta en dos personas totalmente distintas.

Hay más rutina y dejadez, las discusiones son por cosas más importantes y los conflictos no se consiguen resolver del mismo modo que al principio. Anna recurre al dibujo para poder salvar su relación e inventa Supereroi la trama de dos superhéroes cuya misión es superar todos los obstáculos que surgen en el camino de una pareja con muchos años a su espalda. Gracias a esto podemos ver qué le preocupa a Ana en su vida diaria con Marco y cómo lucha por solventarlo.

También hay juegos de montaje que funcionan bastante bien en las transiciones de un tiempo a otro con un simple corte, pero bastante efectivo en el que han pasado 10 años y no nos hemos dado ni cuenta. Se trata de un vaivén de idas y venidas, de vivencias cotidianas pero que suponen un punto clave en la consolidación de una relación.

Aunque la trama fluye y ambos protagonistas tienen una química muy enternecedora, no deja de ser otra película romántica en la que el humor funciona regular por ir al chiste fácil.

Es una película para ver tranquilo en el sofá de tu casa un domingo.