3 Butacas de 5
La burbuja de las producciones de superhéroes sigue su cauce constante con la multitud de proyectos en salas, streaming y en preparación. DC y Marvel siguen a lo suyo, peleando por mantener vivo un río que cuando acabe seco más de uno meterá la cabeza en píldoras de lorazepam.
Ese mundo y sus categorías inferiores también llaman la atención de otras producciones, que aunque no pretenden llegar al mismo nivel, tienen a su favor la construcción de un relato honesto sin pretensiones. Es el caso en particular de ‘Samaritan’, la nueva película de Prime Video protagonizada por Sylvester Stallone, y que después de pasarse años en un cajón por fin ve la luz tras la puesta en marcha de MGM.
Sylvester Stallone es el gran protagonista de una película sincera, que no necesita de grandes alardes, ideas rocambolescas o la creación de universos paralelos. Un largometraje muy noventero, en la que los malos son muy malos, los buenos son los más desfavorecidos y la esperanza se reparte a golpes de puñetazo de un héroe retirado.
Sam Cleary (Javon “Wanna” Walton) es un joven de 13 años que vive en un suburbio de la ciudad. Vive con su madre, en un apartamento maltrecho, con el dolor de la pérdida de su padre y que su pasión por Samaritan es lo que le convierte en un joven alegre.
Samaritan fue un superhéroe que desapareció hace 25 años tras su enfrentamiento ante Némesis. Sam sospecha que su misterioso y solitario vecino, el Sr. Smith (Sylvester Stallone), es en realidad el personaje legendario que fue declarado muerto tras una batalla en un almacén con su rival. La esperanza del pueblo se perdió aquel día, provocando que la delincuencia y el caos llegaran a la ciudad.
‘Samaritan’ está dirigida por Julius Avery, director de la fantástica Overlord, y que en esta ocasión ofrece un relato sin pretensiones, sacando provecho al carisma de Stallone y al héroe de acción de antaño que reparte fuerza bruta ante los malvados. Es la encarnación de la lucha del pueblo, de la clase trabajadora por volver a encontrar la luz.
Los villanos están capitaneados por Pilou Asbæk (Uncharted, Ghost in Shell), el líder de una banda de delincuentes que encuentra la ocasión perfecta para liderar la revolución del caos. Es cierto que las ideas del villano son buenas pero el guion de la película flaquea en dicho punto, terminando por ofrecer un malo que simplemente explota bombas, sin profundidad ninguna. Una lástima.
Las escenas de acción brillan en muchos momentos, a sabiendas de que Stallone se lo pasa a las mil maravillas, siendo inteligente en su ejecución pero sobre todo noble, porque ‘Samaritan’ es un entretenimiento muy digno, carente de las elocuencias de otras producciones, y que por eso mismo la convierten en un pasatiempo atractivo con el que disfrutar.
Un relato convincente, de buenos y malos, niños y mentores, que se engrandece gracias a Sylvester Stallone y una posible franquicia de tintes noventeros que en otros tiempos hubiera sido un pelotazo.