El largometraje documental AITA MARI de Javi Julio, producido por Nervio, se ha estrenado este fin de semana en cines de País Vasco, Navarra, Cataluña y Madrid con distribución de Atera Films.
Hablamos con Javi Julio, director de la película que narra la trasformación de un viejo atunero en barco de rescate por parte de la ONG vasca Salvamento Marítimo Humanitario (SMH) y los problemas burocráticos sufridos hasta conseguir el despacho (permiso) para surcar las aguas del Mediterráneo y asistir a 80 personas que escapan de lugares de conflicto haciéndose a la mar en embarcaciones precarias.
El director renuncia a las imágenes más dramáticas y opta por mostrar de una forma didáctica las trágicas consecuencias de la política europea de fronteras y lanzar un mensaje de esperanza ante el rechazo a lo desconocido y al extranjero. Como explica el cineasta donostiarra, “no es un documental sobre la épica del rescate en el mar. Habla de cómo gente sencilla y anónima se transforma y abandona su vida anterior para realizar el trabajo que deberían hacer los estados”.
Entrevista Javi Julio, director de ‘Aita Mari’
Dirigida por Javi Julio, AITA MARIestá escrita por Fernando Erre y producida por Santi Donaire. Javi Julio, Igor Arabaolaza, Ricardo García Vilanova, Celia Hernández, Pascal Poissonnier, Iñaki Gereñu y Beñat Gereka son los operadores de cámara. Daniel Iglesias es el responsable del sonido de entrevistas, Víctor Sánchez (Elkar Estudioa) se encarga del sonido de estudio y Santi Salvador, junto a Koldo Corella, de la postproducción de sonido. Pello Ramírez firma la banda sonora. Igor Arabaolaza es el responsable de las animaciones y Fernando Mahia y Edou Thiam de las traducciones. Belén Bembé se ocupa del diseño de los títulos y el cartel.
AITA MARI cuenta con la participación de EITB y el apoyo institucional del Gobierno Vasco, a través del Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales; Diputación de Gipuzkoa, Diputación de Bizkaia; y Diputación de Álava. También cuenta con la colaboración especial de Laboral Kutxa, así como el apoyo de la Fundación Orona, la Fundación Irizar, la Fundación Rosa Luxemburgo y ELA Sindikatua.