3 Butacas de 5
Ser padre es una de las mejores maneras de vivir la vida. No solamente por educar, inculcar valores y formar una familia, sino porque nos damos cuenta de que podemos llegar a madurar mucho más. Es precisamente sobre la inmadurez de la paternidad y el duelo, los temas principales que aborda la película Ser Padre, protagonizada por Kevin Hurt (Jumanji) y dirigida por Paul Weitz (American Pie, In Good company).
Se trata de una de las nuevas películas disponibles en Netflix, y sin duda una de las más agradables que se pueden disfrutar actualmente en la plataforma. Ya no sólo porque es un film que te pinta una sonrisa, sino que te permite pasar un rato súper entretenido en compañía de tu familia.
Kevin Hurt interpreta a un padre primerizo que, por circunstancias de la vida, pierde a su mujer a los pocos días después de dar a luz a su hija. Un palo enorme que hunde en una terrible depresión al progenitor, y que tratará de salir hacia delante gracias a su familia, el amor hacia su hija y la conciliación laboral.
Melody Hurd interpreta a la pequeña de la familia, una protagonista que le inculca al largometraje el encanto necesario, además de hacernos disfrutar de algunos momentos entrañables junto a su padre. Es evidente que no estamos hablando ni mucho menos de la gran película del año, tampoco lo pretende. Se trata de un film súper correcto, que exprime toda la buena alma que posee y nos saca el lado dramático de un Kevin Hurt, actor al que estamos acostumbrados a ver en interpretaciones histriónicas.
Conciliación laboral, presión por seguir hacia delante y dar lo mejor a nuestra familia, la película solventa sin problema todos los elementos necesarios para hacernos pasar un buen rato. Desde el ritmo, la empatía con su elenco y equilibrio entre romanticismo, comedia y drama.
El largometraje posee además los elementos románticos que debe tener una película del género. ¿Por qué? porque para ver cosas tristes mejor pones las noticias por desgracia y aquí te lo pintan todo de tal manera para disfrutar. No te hablo de como el protagonista se repone a la perdida, sino también a encontrar un motivo de felicidad con el que sentirse más completo. Ahí es donde entra en juego Dewanda Wise, interpretando la parte romántica de la película al aparecer en la vida de los protagonistas.
Ser Padre es una opción súper tierna y agradable, con pinceladas cómicas de un Kevin Hurt, que lo borda como alma inmadura, protectora y a la vez enternecedora.