3´5 butacas de 5
Los animales siempre han servido de espejo en el que reflejar las emociones humanas. No tenemos que indagar profundamente en cualquier filmoteca para encontrar ejemplos cinematográficos: Las aventuras del Dr. Doolitle, Como Perros y Gatos, Mi Gran Amigo Joe… el cine es una herramienta eficaz de llevar a cabo una representación cargada de sensibilidad.
El Magnífico Iván es uno de los últimos ejemplos en forma de película que usa a los peludos protagonistas como reflejo de una historia humana, capaz de emocionar y entretener a toda la familia. El largometraje está basado en la historia real de Iván, un gorila de lomo plateado que ha vivido toda su vida en cautividad, criado por un humano (Bryan Cranston) y usado como llamada de atención para hacer negocio en un centro comercial.
La película no es un reflejo de otras historias en la que los animales odian a los humanos, al contrario, en esta ocasión el largometraje traza una relación entre padre e hijo de una manera hermosa y en la que los animales, pese a estar cautivos, son conscientes de donde están y de lo que hacen. ¿Qué la diferencia? Sin duda el toque Disney que es capaz de transmitir un sentimiento familiar y de emoción de una manera única.
La historia de Iván es fantástica, un gorila capaz de pintar y de expresar sus sentimientos a través de la pintura, una manera con la que el animal abre su alma y rompe su monotonía diaria de salir a hacer un espectáculo frente a los visitantes. Es esa sensación de cautividad la que hace especial a la historia, donde aquí si hay amor por los animales, aunque es evidente que estas criaturas merecen vivir en un espacio abierto.
El film también posee alguna referencia a los grandes clásicos Disney como Dumbo, no por la presencia de dos elefantes, sino por su historia en sí de ellos. Una película que es un alegato a la libertad de los animales, al buen trato de ellos y a la necesidad de cariño y comprensión que no encontramos los humanos entre nosotros pero sí lo hayamos en los animales.
El Magnífico Iván es una apuesta familiar entrañable con la que disfrutará toda la familia no solamente por la historia sino por el mensaje. Se nota la implicación de Angelina Jolie en el proyecto y no solamente por prestar su voz a uno de los personajes, también de producir una película llena de sensibilidad y solidaria con la causa. Si he de ponerle algún pero quizás se eche de menos algún alivio cómico más allá de las típicas muecas de algún animal pero eso correspondería a otro tipo de historia, la de Iván es un cuadro en la búsqueda de la libertad.